Históricamente
hablando, el ser humano construyó viviendas e infraestructuras desde hace mas
de 10.000 años, y desde el principio, buscó refugio en cuevas de animales,
accidentes geográficos, amontonando ramas, rocas, tierra o cualquier elemento
que le brindaba la naturaleza.
Así
fue encontrando la manera de construir viviendas más confortables y de acuerdo
a lo que eran sus necesidades de protección de los animales, fenómenos
metereológicos y otros agentes del entorno.
Aunque
muchas sociedades del planeta, aún hacen sus construcciones con materiales de
su entorno natural (a los que está adaptado desde siempre), muchas poblaciones
(principalmente en las ciudades)
construyen con materiales industrializados y-o sintéticos que perjudican la
salud de las personas, y la biodiversidad del planeta.
Se consideran
construcciones naturales:
ü
Las realizadas con materiales no industrializados,
que nos brinda la Naturaleza en el lugar.
ü
Las ecológicamente sanas, (que no contaminan
el entorno ni a sus moradores).
ü
Integrables a la Naturaleza, (que cuando
dejan de utilizarse se integran a la tierra en un lapso prudencial sin dejar
contaminantes a las próximas generaciones).
ü
(ATENCIÓN CON LOS MATERIALES RECICLABLES,
PUEDEN SER MUY CONTAMINANTES).
ü
Económicamente viables, (las construidas sin despilfarros ostentosos de
materiales ni energía).
ü
Satisfactorias a nuestras necesidades. (No
necesariamente a nuestros deseos).
ü
Logradas sin utilizar nocivamente a las
personas, la tierra o los recursos.
ü
Sostenibles a largo plazo. (con un mínimo
costo de mantenimiento).
Proyecto
Tendremos
en cuenta algo que es clave, pensar y diseñar organizadamente, acopiar los
materiales para luego construir.
En
primer lugar armamos en nuestra imaginación lo que necesitamos o soñamos
construir, de esta manera vamos obteniendo una imagen clara de lo que realmente
necesitamos. Luego si tenemos el lugar o zona donde construir, comenzamos con
la observación del mismo, haciendo un Relevamiento lo más detallado posible.
Entonces comenzamos a diseñar lo que imaginamos a un plano y luego a una
maqueta en la que tendremos más facilidad de descubrir los detalles ya que en
ella contamos con tres dimensiones. Esos detalles descubiertos, los volcamos a
los planos de obra definitivos.
Seguimos
entonces con la selección y acopio de materiales, para finalmente construir.
Selección
de materiales
Proceso de
selección:
ü
Durabilidad: es
importante saber el tiempo de durabilidad de los materiales, teniendo en cuenta
el uso y los agentes climáticos (sol, frío, viento, calor humedad) en pocas
palabras ver si los materiales elegidos son capaces de conservar la vivienda
confortable y sanitariamente aceptable.
ü
Cantidad: verificar
que sean suficientes en la zona para no depender de otras personas o
condiciones de fabricación y transporte
por lo menos en los materiales básicos.
ü
Experiencias
en la zona: También
es importante consultar a personas que hayan trabajado con estos materiales en
la zona.
ü
Mantenimiento: tener en
cuenta los costos en dinero y esfuerzo para mantener sus condiciones durante su
vida útil.
ü
Posibilidad: es posible
intercambiar con personas del lugar materiales que tenemos en abundancia por
otros que nos faltan.
ü
Transporte
y almacenado:
cuando el material no es suficiente, tenemos que calcular como traerlo de otro
lugar para que no se rompa y, mientras se tiene guardado, como evitar que se
eche a perder.
ü
Mano de
obra:
por ejemplo no podemos pensar en verjas o rejas de hierro, si en la zona no hay
herrero, entonces pensaremos en darle trabajo al carpintero local y así con
todos los gremios.
Imitando
a la naturaleza
La
creación arquitectónica es una creación del hombre, no de la naturaleza virgen,
con la que no se puede ni se debe competir, en todo caso deberíamos imitar.
Lo
mas coherente en este sentido es la arquitectura orgánica, que acentuando
siempre su contacto con la naturaleza, genera diseños que no pretenden una
conquista sobre el entorno natural, sino una relación simbiótica con el.
Para
esto el diseñador orgánico, se “sintoniza” para captar las armonías del entorno
natural y los traduce en estructuras que nos recuerdan su continuidad.
Generando siempre un sentimiento de libertad,
de ausencia de ataduras o límites que separen una cosa, lugar o actividad de
otra; así podrá el diseño ir adoptando la coherencia formal, estructural y funcional de un organismo vivo.
Por
definición el diseño orgánico es experimental y exploratorio, por lo que jamás
puede dar lugar a formas definidas, a modelos estáticos que puedan llamarse
clásicos. Estos diseños son adaptados al clima, al paisaje, al tiempo y a las
personas.
A
partir de estos diseños podemos conseguir construcciones:
ü
Ecológicamente sanas (No contra
la naturaleza sino en armonía con ella)
ü
Integradas a la naturaleza del lugar
ü
Satisfactorias a nuestras necesidades (no
necesariamente a nuestros deseos)
ü
Económicamente viables (simples,
sin despilfarros onerosos)
ü
Sostenibles a largo plazo (con
mínimo manteniendo).
Logradas
sin utilizar nocivamente a las personas, la tierra o los recursos.
Construcción de tierra
Desde hace unos 10.000 años el
hombre construye con tierra; levantando edificios domésticos y monumentales,
ciudades, palacios, fortalezas, iglesias y mezquitas.
Sin embargo la construcción en tierra,
ha sido hasta no hace muchos años, considerada un fenómeno marginal y precario
con relación a los sistemas modernos dominantes.
Generalmente ejercida durante siglos
por constructores comunitarios, sin planos, ni ensayos comprobables y, muy
determinada por la ejecución en época seca.
La construcción en tierra, símbolo
de tradición y del pasado debe hacer frente a la modernidad que le imponen
estos tiempos, revirtiendo la desinformación, los prejuicios y una cierta fama
de debilidad. Con ayuda de la tecnología apropiada, deberá hacer de ella una
construcción capaz de competir con amplias ventajas de costos y salubridad,
frente a otros materiales que la industrialización y el consumismo han
desarrollado con mucho interés.
El cambio entre lo antiguo y lo
moderno es tan veloz que muchas culturas y sociedades, no tienen tiempo de
percibirlo ni programar el cambio (sin duda inevitable) en términos de una
transición respetuosa de su historia y su cultura tradicional.
La extraordinaria riqueza de sus
pobladores, puede ofrecer a las nuevas generaciones de constructores, la
posibilidad de entender ciertas cuestiones constructivas, que, seguramente siguen siendo válidas, o que por lo menos
pueden servir de fuente de inspiración de nuevas imágenes del entorno humano.
Ya que no podemos percibir el pasado como algo estático.
Debería transitarse lo moderno
observando el pasado. Que pese a las brutales destrucciones del entorno
tradicional, el pasado tiene una notable facultad de supervivencia, y la
construcción de tierra puede seguir respondiendo a los principios culturales
que la sustentaron.
Construcción
y modernidad
Si
el concepto de arquitectura de tierra está a menudo asociado a la construcción
tradicional llamada primitiva o superada por los materiales industrializados;
parece lógico preguntarse: ¿puede la construcción de tierra ser moderna?
En
general es difícil definir un entorno moderno que esté en armonía con la
cultura tradicional.
El
Arquitecto turco Dogan Suban sostiene que: la destrucción y la pérdida de
carácter del entorno natural tradicional, no es necesariamente una consecuencia
de la modernización, sino de la incapacidad de la sociedad para conciliar un
modelo de arquitectura impuesto, con el estilo de vida que a la sociedad le
conviene.
Una
aplicación de las formas y principios tradicionales del diseño puede conducir
hacia una arquitectura moderna y sana, afirma el arquitecto Egipcio Hassan
Faty; (1900-1989). Teórico y militante de una arquitectura democrática, cuya
obra excedió mucho el plano de lo reclamativo, para aplicar estos principios en
sus numerosos edificios. Esto consiste en aplicar parcialmente técnicas
modernas en formas tradicionales, lo que puede conducir a soluciones estéticas
satisfactorias y al mismo tiempo, sanas y confortables.
Pocas cosas son mas importantes que
una vivienda sana y confortable para el desarrollo y el crecimiento humano
Prejuicios sobre la
tierra como material de construcción
A
la mayoría de las personas que viven en ciudades o pueblos modernos les resulta
difícil, cuando no imposible. Concebir que un material natural como la tierra,
no necesite ser procesado para construir, y que en muchos casos la excavación
de cimientos, sótanos y o piscinas ofrezcan un material que pueda ser utilizado
directamente para construir.
“Esto
es como en la edad media, ahora tenemos que ensuciarnos las manos con ese
barro”; esta es la reacción de un albañil que nunca trabajó con adobes; pero el
mismo albañil observará complacido sus manos suaves y sin heridas luego de una
semana de trabajar con adobes, ya que el barro no ataca la piel como la cal y
el cemento, y los adobes no tienen los bordes cortantes como los ladrillos
cocidos.
La
afirmación de que insectos puedan vivir en muros de tierra es infundada, cuando
estos son macizos; los insectos solo pueden vivir si hay huecos en muros de
barro con mucha paja o de adobes con juntas o grietas profundas.
En
el norte argentino, el mal de chagas provienen de insectos que viven en muros
de barro y paja con profundas grietas; estas se pueden evitar con gruesas capas
de revoque o construyendo paredes de tierra apisonada o con bloques de barro
con las juntas totalmente rellenas.
Asimismo
si la tierra contiene demasiada materia orgánica como en el caso del barro
alivianado con paja o paredes de fardos, con una densidad menos a 600Kg/m3, se
pueden alojar pequeños insectos y atacarla.
El
problema de que las paredes de barro son difíciles de limpiar (especialmente en
cocinas y baños), se puede resolver pintándolos con caseína, cal-caseína.
Aceite de linaza u otras pinturas.
Los
baños con paredes de barro son generalmente más higiénicos que los revestidos
con azulejos, debido a que las paredes de barro absorben rápidamente la humedad
inhibiendo el desarrollo de hongos.
El
barro aún si contiene paja no es considerado combustible.
Qué
es la tierra
Es
producto de la erosión de las rocas de la corteza terrestre, generalmente como consecuencia
del movimiento de glaciares, del agua y
el viento, también por contracción y expansión térmica de las rocas o por
expansión del agua en las grietas de las rocas.
También
los ácidos orgánicos de las plantas hacen su trabajo.
Por
eso la tierra varía notablemente su composición según el lugar donde se
encuentre.
La
tierra es una mezcla de arcilla, limo y arena y suele contener grava u piedras.
Los
componentes de la tierra se definen de acuerdo con su diámetro:
A
las partículas con diámetros menores a 0,002mm se las denominan Arcillas, entre 0,002mm y 0,06mm Limos y entre 0,06mm y 2mm Arenas, partículas mayores Grava y Piedras.
La
arcilla actúa como aglomerante para pegar las partículas mayores, como lo hace
el cemento en el hormigón.
El
limo, la arena y otros agregados le dan estructura a la tierra para construir.
Dependiendo
del elemento que prevalece en la mezcla podemos hablar de mezcla arcillosa, limosa o arenosa.
Además
un suelo extraído de una profundidad menor a 40 cm. contiene generalmente
materia orgánica; producto de la descomposición de las plantas y/o animales.
Que
debemos saber de la tierra como material de construcción
La tierra como material de construcción es
utilizada de diferentes formas:
ü
Barro: se
denomina barro a la mezcla de arcilla, limo, arena y agua, con la posibilidad
de los agregados de grava, aglomerantes y estabilizantes.
ü
Cuando se habla de bloques de barro con
paja u otra fibra aglomerante, hechos a mano, secados al sol, se emplea el
término ADOBE.
ü
Cuando se habla de bloques de tierra
comprimida se emplea el término BLOQUES
DE SUELO.
ü
Cuando provienen de una ladrillera, no son
cocidos y no contiene paja, se emplea el término LADRILLO CRUDO.
En
comparación con otros materiales industrializados el barro tiene tres
desventajas:
1. El barro no es un material estandarizado.
Su composición depende del lugar donde se
extrae. Resulta necesario hacer pruebas con distintas proporciones, agregándole
aditivos si fuera necesario para lograr
el barro deseado.
2. El barro se contrae al secarse.
A
consecuencia de la evaporación del agua del amasado, pueden aparecer fisuras.
La
retracción lineal durante el secado oscila entre el 3 y el 12%, en técnicas de
tierra muy húmeda (barro). Y entre un 0,4 y un 0,2% en técnicas con mezclas
casi secas.
3. El barro no es impermeable.
Debe
ser protegido de las lluvias y de las heladas, en estado húmedo.
Por
otra parte, el barro tiene muchas ventajas en comparación con otros materiales
de construcción
1.
El barro
regula la humedad ambiental:
Tiene
la capacidad de absorber y desorber humedad mas rápido y en mayor cantidad que
cualquier otro material de construcción; Por eso regula el clima interior.
Cuando
en un ambiente interior aumenta súbitamente la humedad relativa del 50% al 80%,
las paredes de barro pueden absorber 30 veces mas humedad que los ladrillos
cocidos en un lapso de 2 días, aún cuando se coloca un adobe en una cámara
climática a 95% de humedad relativa durante 6 meses, este se humedece pero no
se ablanda. Mediciones hechas durante 8 años en una vivienda recientemente
construida en Alemania, donde todos los muros son de tierra, mostraron que la
humedad relativa en esa vivienda es del 50% durante todo el año. Está fluctúa
solamente entre un 5 y un 10% ofreciendo así condiciones de vida más
saludables.
2.
el barro
estabiliza las temperaturas del ambiente interior:
El
barro almacena calor.
En
zonas donde las diferencias de temperaturas son amplias, o donde es necesario
almacenar la ganancia térmica, el barro puede balancear el clima interior.
3.
El barro
ahorra energía y disminuye la contaminación ambiental en relación a otros
materiales de uso frecuente.
Para
preparar, transportar y trabajar el barro en el sitio. Se necesita solo el 5%
de la energía requerida para la preparación, transporte y elaboración de
ladrillos cocidos.
4.
El barro es
reutilizable:
El
barro crudo se puede volver a utilizar ilimitadamente.
Solo
necesita ser humedecido con agua para ser reutilizado.
El
barro nunca será un estorbo que contamine el medio ambiente.
5.
El barro
economiza materiales de construcción y costos de transporte.
Generalmente
la tierra que se encuentra en las obras, producto de excavaciones de cimientos,
piscinas, drenajes, etc., puede ser utilizada para la construcción.
6. El barro es apropiado para la
auto-construcción.
Las
técnicas de construcción con tierra pueden ser ejecutadas por personas no
especializadas, es suficiente la presencia de una persona experimentada
controlando el proceso de construcción.
Se
pueden emplear herramientas sencillas, de bajo costo.
Durante
el proceso de construcción puede participar toda la familia.
7. El barro preserva la madera y otros
materiales orgánicos.
Mantiene
secos los elementos de madera y los preserva cuando están en contacto directo
con el, debido a su bajo equilibrio de humedad de 0,4 a 6% en peso y a su alta capilaridad.
Los
insectos y hongos no pueden destruir la madera en esas condiciones, ya que los
insectos necesitan un mínimo de humedad del 14 al 18%, y los hongos más del 20%
para vivir.
8. El barro puede
absorber algunos contaminantes del aire del medio ambiente.
El
barro y la salud
La humedad en los interiores ejerce una
influencia significativa en el bienestar de las personas, la tierra tiene la
capacidad de balancear la humedad del aire como ningún otro material.
ü
Una humedad relativa de 50 al 70% reduce el
contenido de polvo fino en el aire.
ü
Activa los mecanismos de protección de la
piel contra los microbios; disminuye la vida de muchas bacterias y virus.
ü
Disminuyen los olores.
ü
Disminuye la electricidad estática.
ü
Una humedad relativa de más del 70%
resulta, en la mayoría de los casos, desagradable, debido a la disminución de
la absorción de oxígeno de la sangre en condiciones cálido-húmedos.
ü
También en ambientes fríos-húmedos se notan
los aumentos en las dolencias reumáticas.
Influencia del
intercambio de aire en la humedad del aire.
Si el aire está a una temperatura de 0ºC y
tuviera 100% de humedad relativa al entrar en el ambiente y se calienta a 20ºC,
esto hace que aumente considerablemente el volumen y, su humedad relativa
disminuirá a menos del 30%. Esto puede afectar nuestra salud, por eso es
necesario aumentar el porcentual de humedad para alcanzar condiciones
saludables.
El efecto del barro
en el balance de la humedad.
Un
material poroso como el barro tiene la capacidad de absorber y desorber la
humedad del ambiente, ofreciendo un balance de humedad en el ambiente interior.
En el barro esto sucede en mayor cantidad y velocidad que cualquier otro
material de construcción.
Experimentos
realizados desde 1978 por el F:E:B. (“forschungslabor fur experimentalles
Bauen” Universidad de Kassel, Alemania), muestran que la primera capa de 1,5
cm. de un muro de barro es capaz de absorber 300 gr. De agua/m2 de muro en
48hs., si la humedad ambiente aumenta súbitamente del 50% al 80%.
En
cambio, la piedra calcárea y la madera de pino de un mismo espesor, absorben
solamente 100gr/m2 aproximadamente, el revoque a la cal 26-76 gr. /m2 y el
ladrillo cocido solo de 6 a 30gr/m2 en el mismo período.
Ensayos
para analizar la composición de la tierra
Para
analizar que un suelo es apto para una aplicación específica, es necesario
conocer su composición.
La
proporción de agregados gruesos (aren, grava y piedras) es relativamente fácil
de distinguir en el tamizado.
En
cambio los agregados finos (limo, arcilla, materia orgánica fina) pueden
diferenciarse únicamente por medio de la sedimentación (Norma DIN 18123).
Ensayos de campo:
Los
siguientes ensayos no son muy exactos, pero se pueden hacer en el sitio en
relativo corto tiempo y son generalmente suficientes para estimar la
composición del barro, y determinar si la mezcla es aceptable para una
aplicación específica.
Ensayo de olor:
El barro puro es
inodoro. Tiene olor a moho si contiene humus o materia orgánica en
descomposición.
Ensayo de la
mordedura:
Una muestra de barro húmedo se muerde levemente;
Los
barros arenosos producen una sensación desagradable.
Los
barros arcillosos dan una sensación pegajosa, suave o harinosa.
Ensayo de lavado:
Una muestra
de barro húmedo se frota entre las
manos, si las partículas se sientes claramente, esto indica que el barro es
arenoso o gravoso, mientras que si la muestra es pegajosa pero las manos pueden
limpiarse al frotarlas cuando se secan, tenemos un barro limoso.
Si
la muestra es pegajosa, haciendo falta el uso de agua para lavarla, se trata de
barro arcilloso.
Ensayo del corte:
Una muestra
húmeda de barro se moldea en forma de bola y se corta con un cuchillo; si la
superficie cortada es brilloso significa que contiene un alto porcentaje de
arcilla, si la superficie es opaca indica un alto contenido de limo.
Ensayo de
sedimentación:
Se agita una muestra de barro o suelo en un frasco transparente. Las
partículas mayores se asientan primero en el fondo y las más finas se asientan
encima. A través de esta sedimentación podemos observar la proporción o
porcentaje de los componentes.
Es
una interpretación errónea asumir que la medida de cada capa corresponde a la
proporción exacta de arcilla, limo, arena y grava; pues algunas partículas más
pequeñas pueden mezclarse entre las más grandes.
Ensayo de la caída
de la bola:
La mezcla a
ensayar debe ser lo más seca posible, pero lo suficientemente húmeda como para
formar una bola de 4 cm. de diámetro a la que elevaremos hasta 1,50m. de altura
y dejaremos caer sobre una superficie plana. Si la bola se aplana levemente y
muestra muy poca o ninguna fisura esta tiene una gran capacidad aglutinante,
que proviene de un muy alto contenido de arcilla, por lo general a esta mezcla
deberá agregársele arena.
En
cambio, si la bola al caer se desgrana casi totalmente, el contenido de arena
es muy elevado y, deberá agregársele arcilla para poder utilizar esta mezcla
como material para construir.
El
material que es relativamente pobre de arcilla, con poca cantidad aglutinante,
puede ser usado para adobes o tapial (tierra apisonada).
Ensayo de
consistencia:
Se
forma con tierra húmeda una bola de 2 a 3 cm. de diámetro, con esta bola se
forma un rollo de 3mm de sección (diámetro o espesor).
Si
el rollo se parte o presenta grandes fisuras antes de alcanzar los 3mm. de
espesor, deberá ser humedecido gradualmente hasta que las quebraduras se formen
solo al llegar a los 3 mm de espesor. Con esta mezcla se forma nuevamente una
bola, si no es posible formarla, el contenido de arena es muy alto o de arcilla
muy bajo.
Si
al querer deshacer la bola entre los dedos índice y pulgar, debemos ejercer
mucha fuerza, el contenido de arcilla es alto; si la bola se deshace
fácilmente, el contenido de arena es muy alto (falta arcilla).
Ensayo de
resistencia:
Se
trata de un ensayo de campo que nos dará una idea bastante aproximada de la resistencia que
tendrá la mezcla una vez seca.
Se
hacen pequeñas cantidades de barro húmedo con diferentes proporciones de
arcilla, limo y arena, sin agregado de fibras, todo se anota en una planilla
cuidadosamente, con cada mezcla se hace una especie de hamburguesa de unos 3
cm. de espesor por 7 cm. de diámetro, marcando a cada una de estas según la
proporción que corresponda. Luego estos testigos se pondrán a secar a la sombra
sin exponerlos a corrientes de aire (el fragüe debe ser siempre lento).
Una
vez bien secas, podemos ver: si se le formaron cuarteadoras, evidentemente
contiene demasiada arcilla, y si al tratar de quebrar con las manos ese testigo
se desgrana fácilmente, contiene demasiada arena o limo.
Hacer
barro
Hacer
barro es una técnica muy sencilla, es básicamente la mezcla de suelo y agua
hasta formar una pasta más o menos blanda, según el uso que se le vaya a dar.
Esta técnica tiene más de 10.000 años.
Para
la confección de adobes y revoques de barro es conveniente prepararlo con unos
días de antelación a su uso, la importancia de esa antelación radica en:
ü
Mejor disolución de las partes sólidas en agua.
ü
La generación de elementos orgánicos
(fermentación).
Para mejorar y acelerar la
fermentación del barro, se le puede agregar de un 10 a un 20% de bosta de
caballo (en volumen).
ü
Harán mas consistente el resultado final.
La
mezcla ideal
Obtener
un buen material de construcción a partir de un suelo, es relativamente
sencillo, siempre que se cuente con cierta experiencia; recordemos que no es un
material estandarizado, es muy variable según la zona de extracción del suelo a
emplear.
La
mezcla ideal para determinada aplicación depende de los componentes de ese
suelo.
Por
ejemplo, un suelo con poca arcilla es ideal para muros de tierra apisonada
(tapial) si contiene terrones arcillosos y poca arena, estos deben ser
disueltos o molidos y agregarles arena para que sirvan como material de
construcción.
Hay
muchos métodos que pueden emplearse para obtener un material trabajable, y sin
terrones.
Por
ejemplo; colocar el material en capas de 15 a 25 cm. de espesor y se cubren con
agua, luego de 2 a 4 días se obtiene una maza blanda que puede ser mezclada con
arena, paja, grava u otros estabilizantes; con los pies, las manos o
mecánicamente.
Es interesante
señalar que diferentes muestra de una misma mezcla, pueden tener diferentes
características, dependiendo del método empleado en su preparación, si la
mezcla contiene suficiente agua en la preparación, el tiempo de amasado y
curado tienen un efecto positivo en el incremento de la cohesividad en el
resultado final.
Mejoramiento
de las características del barro
Solamente
para aplicaciones específicas es necesario modificar las características del
barro.
Tendremos
en cuenta que los aditivos pueden ser como los remedios que curan por un lado
y pueden matar por
otro.
Los
aditivos, ya sean minerales, vegetales o animales, que mejoran algunas
propiedades, pueden empeorar otras.
La
casa en climas templados
Estas
áreas son frías en invierno y calientes en verano, así la casa debe acomodarse
a dos objetivos diferentes: durante el invierno debe preservar el calor y el frío
debe mantenerse afuera, en verano debe ser excluido del interior de la casa y
esta debe estar abierta a las brisas frescas de la tarde.
Aislamiento:
Para conservar la casa
confortable, gastando poco o nada de combustibles o electricidad para
calefaccionar o refrescar el ambiente, es imprescindible aislarla de las
temperaturas y la humedad exteriores.
Atender al ideal de que las paredes,
techos y pisos estén aislados de la siguiente forma de afuera
hacia adentro:
ü
Primero aislante hidrófugo, luego aislante
térmico y por último ira el techo, pared o piso, propiamente dicho.
Si
alteramos el orden de los aislantes dentro de la vivienda esta se convierte en
una heladera cuando la pared o piso se moja, o bien desaprovechamos su inercia
térmica, también la propiedad de regulación de la humedad ambiente del interior de la vivienda (cosa
que es muy notable en las casas de tierra, por esto no es bueno utilizar
pinturas impermeabilizantes en el interior, ni en el exterior).
Las
ventanas deberían tener doble vidrio. Las cortinas pesadas aíslan si están bien
colocadas y los postigones exteriores hacen su aporte.
Si
bien el aislamiento es importante, sin embargo se debe tener una adecuada
ventilación, especialmente en las casa
que estén situadas en zonas donde hay emisiones de gas radón, (gas
tóxico emitido por el granito, la dolerita y otras rocas).
En
algunos lugares también tendremos que tener en cuenta los aislantes acústicos.
Calefacción:
Los sistemas de
calefacción deberán estar ubicados de tal manera que asistan a las temperaturas
lo más equitativamente posible, prefiriendo siempre estufas de alto rendimiento
o losa radiante.
Una
pared que refleje luz solar, un espejo de agua en el jardín o patio en el lugar
estratégico, una lucarna o claraboya ayuda considerablemente a calefaccionar.
También una gruesa pared interior de piedras y/o piso oscuro donde den los
rayos solares, son un buen captador y acumulador de calor.
Invernadero
o jardín de invierno, sobre las paredes del lado del sol. Una pared “Trombe”
del lado norte es muy eficiente.
Una
Pre-entrada evita el escape violento de un gran volumen de aire caliente.
Trampas de calor y cortinas de viento.
Terraplenes en la parte de la sombra.
También de ese lado son importantes las
paredes lo más térmicas posibles.
Refrigeración:
También es
importante contar del lado de la sombra, con una estructura que llamamos (casa
de sombra) hecha con enredaderas, parras y otras plantas por donde haremos
circular el aire que refrescará la casa cuando la temperatura lo requiera.
Esto, combinado con la plantación de árboles de hojas caducas, de manera
estratégica, como cortinas de viento o sombra.
Con
un circuito de tubos de ventilación de aire bajo tierra o una importante masa
de agua, se consigue un excelente refrigerante en el verano.
Distribución
de ambientes
Algunos
puntos a tener en cuenta:
ü
Cuantos miembros son de familia, edades,
costumbres y sexos.
ü
Qué tipos de actividades realizan en la
vivienda.
ü
Que tipo de edificio-estilo-materiales-etc.
ü
Cuantos ambientes serán necesarios.
ü
Para que
los distintos ambientes resulten cómodos las medidas deberán ser
proporcionadas y las puertas y ventanas no obstaculizarán la libre circulación
(incluyendo personas discapacitadas).
La casa como lugar
de trabajo:
Es mucho más barato adaptar en la casa un área pequeña de manufactura y
oficina que comprar o alquilar estas comodidades separadamente, además
estaríamos ahorrando los gastos de transporte.
Orientación
Es
decir, hacia donde deben tener vistas las ventanas de los ambientes principales
para su mejor soleamiento y luminosidad. Los ambientes cuyas ventanas miran al
norte, están libres de los rayos solares en el rigor del verano por hallarse
más alto el sol, y en el invierno los reciben en abundancia durante varias
horas, debido a que el sol está más hacia el horizonte. Esto está relacionado
con el ancho de los aleros.
La
orientación de las ventanas y con sol por las mañanas es excelente en el
invierno, y tolerable en el verano, la orientación al oeste, dentro de lo
posible debemos evitarla porque en la tarde el recalentamiento de la atmósfera
por los rayos solares se torna insoportable en el verano. La orientación de las
ventanas al sur, no es conveniente porque carecen de soleamiento durante todo
el año.
En
consecuencia podemos decir que la vivienda mejor orientada es aquella en que
las ventanas de los ambientes principales tienen vista al cuadrante noreste.
Lugar
de ubicación de la vivienda
Algunos puntos para
tener en cuenta:
ü
Sector de
peligro de fuego.
ü
Ruidos molestos.
ü
Dirección
de los vientos fríos, calidos, polvorientos, salinos, perjudiciales.
ü
Paisajes
(agradables-desagradables).
ü
Reflexión
de espejos de agua.
ü
Áreas
inundables.
ü
Zonas de
derrumbes o avalanchas.
ü
Accesos y
caminos (existentes, posibilidad de construcción).
ü
Cinturón
termal (en zonas de pendientes, franjas más templadas).
Conclusión:
Las casas bien
diseñadas son más económicas de mantener que las casas que necesitan sistemas
consumidores de gran cantidad de energía (estufas-hogar y acondicionadores de
aire, ventiladores, etc.), además capacitan a las personas para vivir
confortablemente sin utilizar grandes cantidades de hidrocarburos o leña, que
aunque eventualmente nos sobre, el quemar leña
u otros combustibles, siempre será destrucción de materia orgánica fuera
de los ciclos naturales y gran contaminación.
Estabilizantes
Por
lo general si un muro está protegido de las lluvias por aleros y zócalos; y de
la humedad ascendente por algún aislamiento horizontal, difícilmente necesite
estabilizarse el barro.
Los
estabilizantes más usados contra la humedad son: el cemento Pórtland y los
productos químicos hidrófugos, polietileno (por estar más al alcance).
También
se pueden utilizar productos animales como sangre, orina, estiércol, suero y,
otros.
Productos
vegetales son utilizados como por ejemplo la savia de distintas plantas, como
la de la tuna, o aceites de semillas oleaginosas como las de lino, del que se
usa el aceite doblemente cocido; han dado muy buenos resultados.
Los
resultados deben ensayarse en cada caso, antes de usar los aditivos en
elementos de construcción.
Las
fisuras generadas por retracción durante el secado dependen directamente de varios
factores, los principales son: contenido de
agua, cantidad de arcilla (aglomerante), cantidad de limo, arena y grava
(estructurante), también es importante el tiempo de secado y la reducción de las
medidas estructurales, como en el caso de la producción de adobes.
La
incorporación de fibras ya sean vegetales o animales reduce notablemente la
producción de fisuras por retracción.
El
aislamiento térmico y acústico del barro, puede incorporarse añadiendo aditivos
porosos como paja, algas, corcho y otras fibras vegetales livianas; también
pueden ser partículas minerales livianas, como son la arena volcánica, piedra pómez
o ripiolita (arcilla expandida), también pueden utilizarse para el mismo fin
productos vegetales como aserrín. Virutas, chipiado de ramas y hojas secas, cáscaras
de cereales, etc.
Estabilización
de la tierra
Así
se puede denominar cualquier
procedimiento que endurezca la tierra, la impermeabilice o elimine los cambios
de su volumen por contracción y/ o expansión.
Tipos
de muros
La construcción con tierra es tan versátil y dinámica
que casi podemos decir que depende de la imaginación del constructor y las
propiedades del suelo con que cuenta.
Los
tipos de muros mas utilizados son:
De tierra apisonada
(tapial):
La tierra apisonada o tapial se utilizo durante siglos como técnica de construcción
de muros; en Asiria se encontraron cimientos de tierra apisonada que datan de
5000 años antes de cristo.
La
técnica básicamente consiste en rellenar un encofrado con capas de tierra de 10
a 15 cm. de espesor compactando cada una de ellas con un pison.
De adobes:
La construcción con
adobes también es una técnica muy
antigua. Se encontraron en Rusia, construcciones de adobes que datan del año
8000 antes de cristo. Y en el norte de Egipto, pueden verse estructuras
monumentales de 3200 años de antigüedad.
La
técnica se basa en rellenar moldes con barro en estado plástico, y que luego de
desmoldar el barro se dejan secar para
utilizarlos en la elevación de muros.
Algo
parecido al adobe, aunque con otras características, son los bloques de suelo,
están hechos con tierra solo humedecida y prensada dentro de un molde en forma
manual o mecánica.
De
la misma forma pueden hacerse adobes y bloques alivianados.
De chorizo:
Utilizado tradicionalmente
en la pampa y litoral de Argentina, la técnica se basa en una estructura de palos, de los que se
sujetan alambres o varas más finas de forma horizontal cada20 o 25 cm.
aproximadamente una de otra, sobre las mismas se van montando chorizos de paja
y barro, de abajo hacia arriba hasta formar el muro.
Pared francesa:
Así le llaman en la Patagonia a un tipo de muro
que hacen los lugareños; la técnica es
la siguiente: sobre una estructura, la que sostiene el techo y las aberturas de
la vivienda, se sujetan mediante clavos, cañas coligues o varas de ciprés en
forma horizontal, en ambas caras de los
palos de la estructura cada 10 o 20cm. formando una jaula, la que es rellenada
con barro con paja, para luego ser revocada por ambas caras.
Esta
misma técnica es conocida como bahareque o quincha en otras partes del mundo.
De paja enrollada:
Sobre una
estructura principal con postes verticales que no tienen una separación mayor
de 1 m.
entre
poste y poste; se van colocando varas mas finas en la que previamente se les
enrolla paja con barro.
De paja encofrada:
Consiste
básicamente en humedecer paja entera con arcilla liquida, colocarla en un
encofrado, apisonarla y luego retirar el encofrado.
De fardos:
Se trata de apilar fardos
de pasto o paja formando los muros, los que luego deberán ser revocados con un
buen espesor de barro; los fardos se colocan entre o fuera de una estructura
independiente que sostiene el techo.
Algunas técnicas
tradicionales con barro húmedo:
Mientras
que en la construcción con adobes, estos se asientan con barro plástico, en las
técnicas húmedas se unen
mecánicamente mediante el
compactado, pegado, apretado o lanzado.
En
el sur de la India se emplea aun hoy una técnica con barro plástico muy simple:
se vierte el barro sobre el muro en construcción el que se distribuye en capas
de 2 a 4 cm. de espesor, la pasta expuesta al sol y al aire, seca rápidamente y
el muro se puede elevar continuamente capa por capa.
Otra
técnica consiste en formar bolas de barro húmedo, las que se apilan formando
pares, generalmente con formas redondeadas.
En
el norte de Yemen se construyen edificios de varios pisos utilizando una técnica
con barro húmedo denominado Zabur, esta técnica consiste en formar manualmente
bolas de barro con paja y se lanzan con fuerza para así construir el muro de
tal manera que se compacte y adhiera a la base, formando una masa homogénea, la
superficie es generalmente compactada y uniformada golpeando con una paleta de
madera.
En
Hungría se conoce desde la edad media una técnica que utiliza barro plástico
moldeado a mano, en forma de cilindros y conos, con los que se construyen muros
sin barro de asentamiento.
Una
técnica de construcción denominada Cob, que utiliza barro húmedo con paja y
alto contenido de arena, se extendió mucho en el siglo XV y hasta finales del
siglo XIX en el sudoeste de Inglaterra.
Muchas
son las posibilidades, aunque no todas se pueden utilizar en la misma
circunstancia, ya que todas las técnicas tienen sus ventajas y desventajas
según el lugar, la mano de obra con que se cuenta y el tipo de construcción que
se desee.
Techos
A
los techos inclinados se les puede aumentar el aislamiento térmico y acústico
colocando una capa de lana o barro alivianado con mucha paja entre el
entablonado y la cobertura final que generalmente es de chapas, tejas
cerámicas, tejuelas de madera o pizarra y techos vivos.
Techos
con recubrimiento de barro:
Cubiertas
planas con recubrimiento de tierra se utilizaron durante siglos en la
arquitectura rural tradicional en climas secos.
Uno
de los desafíos más grandes en la construcción, es hacer exitosa la
construcción de techos de barro resistentes a las inclemencias del tiempo, que
prueben ser durables en zonas lluviosas.
En
zonas lluviosas donde las cubiertas inclinadas son comunes, las edificaciones
tradicionales no tienen cubiertas de barro.
Sin embargo, investigaciones recientes han
probado que es posible incrementar la
resistencia del barro a la lluvia utilizando aditivos.
Basado
en ensayos realizados en el F.E.B. (laboratorio de Investigación de
Construcciones experimentales, ubicado en Alemania), sobre una estructura de
troncos, ramas y raíces, se realizó una cubierta con varias capas de mortero de
barro hasta formar un espesor de 8 cm. en total.
La primera capa es de barro arcilloso rebajado
con piedra pómez (0 a 12mm de diámetro) y aceite usado de motor:
52
partes de barro, 28 partes de pómez, 1 parte de aceite, esta provee aislante
térmico, se aplica en consistencia plástica y se compacta golpeando.
La
capa superior de 2 a 3 cm. de espesor, se ejecutó con la siguiente mezcla:
72
partes de barro, 36 partes de pómez (0 a 5mm), 12 partes de estiércol de vaca,
12 partes de estiércol de burro, 8,5 partes de aceite usado de motor, 6 partes
de fibra de sisal (3 a 5cm de largo) y una parte de aceite de linaza doblemente
cocido.
Luego
de algunos días, después que la mezcla estaba casi seca, se recompactó con una
llana metálica con gran presión hasta que la superficie quedara brillante.
Bóvedas
y cúpulas de adobe
Espacios
cubiertos por bóvedas y cúpulas de adobe, se encuentran principalmente en
edificaciones religiosas en Europa.
Por
otra parte en Asia, África y en otras partes se utilizaron en residencias y
edificios públicos, estas estructuras demostraron tener varias ventajas en
climas cálidos y secos, especialmente en áreas con altas temperaturas diurnas.
Estas
proveen mejor control climático natural que los espacios cúbicos usuales,
debido a su masa térmica y su altura en el centro de la cúpula donde el aire
caliente fácilmente puede ser descargado por
las aberturas.
Estas
tienen una superficie menor que los espacios cúbicos con el mismo volumen, y
por todo esto menor ganancia térmica.
Por
el mismo motivo en climas fríos y moderados, la pérdida de calor es menor
reduciendo así la energía necesaria para calentar los espacios.
En
todos los climas las cúpulas y bóvedas requieren menor material de construcción
para un mismo volumen de espacio.
La
construcción de cúpulas y bóvedas son más económicas, en relación a cubiertas
planas o ligeramente inclinadas.
Muchas
zonas áridas de nuestro planeta no posen madera, por lo que se han desarrollado
técnicas para construir cúpulas y bóvedas de bloques de tierra, no solo sin vigas estructurales, sino también sin
encofrados.
Las
bóvedas y cúpulas son elementos estructurales curvos, bi-dimensionales, que
sirven para cubrir espacios y solo trasmiten las cargas a la compresión.
Si
la superficie tiene una sola curvatura se denomina bóveda, si la superficie
tiene una curvatura doble (en dos direcciones) se denomina cúpula.
Construcciones
sismorresistentes
los
sismos ocurren por movimientos de las placas
tectónicas y por actividades volcánicas, miles de personas son afectadas
por esto cada año. Los edificios son afectados mayormente por el movimiento de
la tierra en el plano horizontal, los movimientos verticales son menores.
En
construcciones de uno o dos niveles, el peligro consiste en que con el
movimiento los muros tienden a caer hacia fuera
y por lo tanto los entrepisos y techos se derrumban.
Una
solución técnica sismorresistente para construcciones hasta dos niveles, busca
que los muros no se abran hacia fuera mediante la realización de encadenados
inferiores y superiores unidos entre sí con columnas cada tres o cuatro metros
y que los techos se encuentren bien armados y anclados al encadenado superior.
La cobertura del techo es preferible que sea liviana (pizarra o tejas deben
evitarse).
Es aconsejable que la planta baja sea sólida,
mientras que la alta sea liviana preferiblemente una estructura flexible.
También
las formas redondeadas son notablemente más resistentes que las cuadradas o
rectangulares.
Pisos
de barro
Las
superficies expuestas al desgaste como los pisos, requieren de una alta
calidad. Estas deben resistir presión, abrasión, ser impermeables, estar libres
de fisuras y ser de fácil limpieza.
Es
difícil construir tales superficies con barro, pero si se ejecutan
cuidadosamente no es imposible, lo más complejo es obtener suficiente
resistencia a la abrasión. Es generalmente más fácil evitar los esfuerzos para
alcanzar este requerimiento utilizando sobre el barro revestimientos de
cerámica, madera o piedra, o bien cubrir el barro con alfombra.
Revoques
de barro
Es
difícil establecer cuales deberían ser las proporciones ideales para un revoque
de barro, ya que no solo influyen en las propiedades las proporciones de arena,
limo o arcilla, sino principalmente la granulometría de la arena, el contenido
de agua, el tipo de arcilla, la forma de preparación, el tipo y cantidad de aditivos, y el tiempo de
amasado.
Por
este motivo es necesario hacer revoques de pruebas con distintas mezclas para
determinar cuál es la más adecuada.
Los
revoques de barro se adhieren muy bien y se pueden aplicar sobre superficies de
barro, ladrillos, piedra natural y hormigón.
Lo
importante es que la superficie sea suficientemente rugosa y previamente
humedecida para facilitar la adherencia del material.
Revoques
exteriores:
Los revoques exteriores expuestos a
las inclemencias del tiempo, deben ser resistentes a los cambios climáticos o
deben protegerse mediante la aplicación de pinturas impermeables de capilaridad
negativa.
Es
importante en climas fríos que el revoque exterior y la pintura tengan una
buena difusión del vapor, para que el agua condensada en el muro pueda ser
fácilmente transportada hacia el exterior.
Revoques
interiores:
Los
revoques interiores de barro son menos problemáticos que los exteriores, si
presentan pequeñas fisuras estás pueden ser selladas con la pintura.
Las
aristas o bordes suelen dañarse con cierta facilidad, para evitar estos daños
deben redondearse o protegerse con algún elemento rígido como molduras o
listones de madera.
La
adición de harinas de centeno o trigo cocidas (engrudo cocido) hace al revoque
final más trabajable y aumenta la resistencia de la superficie a la abrasión.
Consolidación de la
superficie:
El
método más simple de reforzar una superficie especialmente contra la erosión es
consolidándola. Esto se puede hacer alisando la superficie con una herramienta
de metal o empleando piedras muy lisas convexas, con las cuales se frota la
superficie con movimientos circulares y ejerciendo presión cuando está húmeda y
ligeramente plástica (estado de cuero).
Este
tratamiento es adecuado cuando las superficies se ponen brillosas y no quedan
visibles poros ni fisuras, aunque esta acción no altera la composición del
material, se crea una sorprendente resistencia a las inclemencias climáticas
Pinturas
Las
pinturas en las superficies expuestas deben ser periódicamente renovadas, la
pintura puede ser erosionada físicamente por el viento, el congelamiento o la
lluvia, o químicamente erosionada por la radiación ultravioleta y la lluvia
ácida, por eso es bueno que estén protegidas por aleros o galerías.
Las
pinturas exteriores deben ser repelentes al agua y al mismo tiempo (especialmente en climas
fríos) deben ser porosas con el objetivo de permitir la difusión del vapor
hacia el exterior, por ello el látex y algunas pinturas similares no se
recomiendan.
Algunas mezclas
recomendadas para pintar:
LECHADA DE CAL:
La lechada de cal
debe ser muy fina para que pueda penetrar en la superficie y al secar que no se
descascare, es recomendable dar tres o cuatro capas, siendo la primera la más líquida.
La
mezcla se puede hacer con 50 Kg. de cal hidráulica disuelta en 60 lts de agua, es bueno
agregarle a esa mezcla entre 1 y 2 kg. de sal de cocina, para que se prolongue
el tiempo de curado de la cal.
A
esta mezcla también se le puede agregar para darle color algún tipo de arcilla
u otros pigmentos de tierra resistentes a la cal. Esta lechada de cal pura no
es resistente al efecto de la limpieza.
LECHADA DE
CAL-CASEINA:
Las
lechadas de cal son más resistentes a la limpieza y más durables si se les
añade suero, cuajada descremada o polvo de caseína.
En
baños y cocinas donde se requiere una mayor resistencia a la limpieza se
recomienda el siguiente procedimiento: 1 parte de cal hidráulica y 5 partes de
cuajada descremada mezcladas sin agua durante dos minutos. Esta mezcla puede
dejarse reposar por un tiempo y luego se le pueden añadir 20 partes de cal
hidráulica, 2 a
4 % de aceite de linaza doblemente cocido y
agua.
Dos
capas de esta mezcla son suficientes para obtener resistencia a la limpieza en
seco y húmedos. Partes de la cal se pueden sustituir por pigmentos.
PINTURA INCOLORA DE
CASEÍNA:
Con el objetivo de mantener
el color de la superficie de barro e incrementar su resistencia a la limpieza,
se puede utilizar una pintura que consta de: 1 parte de cuajada descremada, con
1,8 a 2 partes de agua y 1/8 a 1/9 de cal hidráulica.
Mediante
la aplicación de esta pintura se adquiere una superficie incolora o ligeramente
lechosa con un brillo suave y sedoso.
La
variedad de pinturas a base de cal es muy amplia, hay infinidad de recetas en
las que se le pueden agregar aditivos minerales, animales y vegetales. En todos
los casos es conveniente hacer pruebas previas.
PINTURA
RESISTENTE A LA LIMPIEZA:
1
PARTE DE SUERO
1
A 3 PARTES DE CAL HIDRAULICA
1,5
A 2,5 PARTES DE AGUA
ACEITE
DE LINO, NO MAS DEL 4% DE LA CANTIDAD DE SUERO.
OTRA:
PARA
BAÑOS Y COCINAS RESISTE LIMPIEZA EN SECO Y HÚMEDO:
1
PARTE DE CAL HIDRÁULICA
5
PARTES DE SUERO, MEZCLADO DURANTE 2 MINUTOS SIN AGUA Y DEJAR REPOZAR
AÑADIR
20 PARTES DE CAL HIDRÁULICA
2
A 4% DE ACEITE DE LINO
AGUA
CANTIDAD NECESARIA.
DISEÑO SOLAR PASIVO
PAREDES MAS TERMICAS AL SUR.
PEQUEÑAS VENTANAS AL SUR.
GRANDES VENTANAS AL NORTE.
PINTURA MAS OSCURAS AL SUR
VIDRIOS DOBLES EN PUERTAS Y VENTANAS AL EXTERIOR.
BUEN AISLAMIENTO TERMICO EN TECHOS Y
PISOS.
PARED DE PIEDRA INTERIOR CAPTADORA
DE CALOR DONDE PEGA EL SOL.
PISO DE PIEDRA OSCURA DONDE DA EL
SOL.
ESTUFA DE ALTO RENDIMIENTO (ENERGIA
SOLAR ACUMULADA).
CORTINAS PESADAS EN VENTANAS.
PRE-ENTRADA.
ESPEJO DE AGUA.
INVERNACULO CONTRA LA CASA.
PARED REFRACTANTE DE LA LUZ SOLAR.
PARED TORMBE, PARA CALENTAR EL AIRE.
PATIO DE SOMBRAS AL SUR.
PANEL FOTOVOLTAICO.
SECADEROS.
COCINA SOLAR. HORNO.
CALENTADOR DE AGUA SOLAR.
TERRAPLEN AL SUR RERACTANTE DE LUZ Y
CALOR.
CORTINAS DE VIENTO UBICACIÓN
ESTRATÉGICA (FRANJA TÉRMICA).
ATRAPA CALOR (CORTINA PERENNE) AL
SUR (HERRADURA).
ÁRBOLES DE HOJA CADUCA EN EL FRENTE
NORTE.
CAÑERIAS DE AIRE BAJO TIERRA O BAJO
UN VOLUMEN DE AGUA IMPORTANTE.
ALERO DE UN LARGO ESTRATÈGICO.
FORMAS TORNEADAS AL NORTE, PARA LA
MEJOR CAPTACIÓN DEL CALOR.
ESTANTES REFRACTANTE DE LA LUZ EN
LAS VENTANAS.
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